20 de julio de 2015

El Gym no es voluntad, es pura venganza.


Y ahí estas corriendo en la caminadora, imaginándote entrando al antro con ese outfit que se te ve  putisensacional y de pura coincidencia y por puro destino te encuentras en ese mismo lugar al que se arrepentirá de todos sus pecados…


Hay muchas razones por las que te puedes encontrar a una mujer decidida en el gym, puede ser por salud, por mantenerse fit, porque le gusta comer mucho y necesita ejercitarse para no engordar o simplemente… por venganza y aunque suene raro es una razón súper valida y más común de lo que pensamos. Te acaban de romper el corazón, aquel novio con el que te veías casada o ese galán que ya dabas por hecho que se harían novios te deja y ya no hay nada que hacer, más que empezar a recuperar tu dignidad y rogar a la vida para que el pendejo se arrepienta de lo que dejo ir.

Una de las formas más saludables de recuperarte de una ruptura es depositando toda esa sed de venganza en las caminadoras, box, pesas, pole dance, crossfit (para las intensas) o  elípticas, cada clase de glutes & abs te hace sentir 1 cm más delgada y estas segura que el día que te encuentres al tipo que “no te valoró” lucirás mejor que Megan Fox, en este proceso, el tiempo es tu mejor aliado. Las primeras semanas no te costarán porque lo que más quieres en el mundo es distraerte para no pensar en él, entonces tener una o dos horas de actividad son lo mejor que puedes hacer, aunque inevitablemente estemos pensando desde el km 1 en él, por lo menos tus manos están ocupadas limpiándote el sudor y no podrás mandarle mensajes.

Al cabo de 4-5 semanas empiezas a ver los ligeros cambios, esos cambios que son de autoestima pura, la ropa te sienta mejor, los elogios cada vez son más recurrentes, tus ganas de salir se incrementan y así tus ganas de ir al gym y llega el momento donde te volviste una fanática y duplicas tus sesiones o te metes a mas clases o descubres nuevos aparatos, da igual si tus amigas te dicen que estas enloqueciendo porque lo único que te importa es sanar lo más pronto posible.

Y justo ahí, en medio de tu locura, es donde la magia comienza, yo lo veo como una cadena de
procesos de sanación, entonces vas al gym te ves y te sientes cada día mejor y te dan  más  ganas de salir con tus amigos,  que buena onda te sacan porque saben que estas deprimida ( y loca) , te compras ropa cuando te sientes triste y resulta que ahora te ves muy bien y con esa nueva ropita y amigos y rutinas y salidas y de pronto.... los hombres empiezan a rondar, como abejas tras la miel y sales con ellos y te diviertes y no logras entender cómo te la estás pasando tan bien y cuando menos lo esperas, resulta que ya no vas al gym para encontrarte a tu ex y vea lo que se perdió, vas por todos aquellos hombres que no te has encontrado y quisieran tenerte.


Irónicamente cuando tu pensamiento ya está ahí, pensando en todas esas oportunidades de amores y ligues, te lo encuentras, más ssssabrosa que nunca y descubres que todos esos escalones, squats y kilómetros valieron la pena, porque ahora te amas más de lo que lo amaste a él algún día.

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